NECESITAMOS UNA
TAXONOMÍA QUE FACILITE
UNA VERDADERA
INVERSIÓN VERDE
LENNYS RIVERA
EXPERTA EN FINANZAS SOSTENIBLES EN WWF ESPAÑA
El Parlamento Europeo está a punto de votar, en los comités de medio ambiente y económico y social, entre los días 14 y 16 de junio, una nueva lista de taxonomía que persigue clasificar el gas y la nuclear como inversiones sostenibles, lo que supondría desviar miles de millones de euros de las energías renovables hacia estas tecnologías. De hecho, esta decisión socavaría el liderazgo y el futuro renovable de España y de la Unión Europea, afectando a sus empresas y a su economía, empeorando la crisis climática, dañando el medio ambiente y amenazando con nuevas subidas de la factura energética.
En la actualidad, España se encuentra entre los diez países más atractivos para invertir en energías renovables de acuerdo al Índice de Atractivo de País para hacer inversiones en Energía Renovable (RECAI) de EY publicado en mayo. Por otro lado, también ocupa el quinto lugar a nivel mundial por volumen de inversión en activos renovables, según el Climatescope 2021 de BloombergNEF.
Asimismo, España es uno de los diez países con mayor capacidad renovable en 2021, de acuerdo a la Agencia Internacional de Energía Renovable (IRENA) y ocupa el sexto lugar a nivel mundial en generación solar y eólica para ese año, según los datos de REN21, la red global de expertos en energías renovables. De igual forma, cuenta con importantes empresas punteras en el sector de las energías renovables.
Seguridad energética
La necesidad de seguridad energética, exacerbada por la inestabilidad geopolítica actual, está conduciendo a los países a nivel mundial a acelerar sus programas de energías renovables, atrayendo aún más el interés de los inversores en este sector.
La Taxonomía de la UE no debe minar los esfuerzos de la UE para reducir su dependencia energética canalizando inversiones en nuevas plantas de gas, que solo aumentarán la demanda europea de un combustible fósil con precios muy volátiles, ni promoviendo la construcción de nuevas plantas nucleares que tardarán entre 15 y 20 años en entrar en funcionamiento.
- Clasificar el gas y la nuclear como inversiones sostenibles socavaría el liderazgo renovable de España
La energía nuclear tiene más de 70 años de desarrollo comercial y aún no ha logrado dar una solución definitiva al depósito de los residuos radiactivos, pues ninguna comunidad quiere ser un cementerio de desechos tan peligrosos. Las nuevas centrales nucleares son cuatro veces más caras que las nuevas centrales solares y la nueva energía eólica terrestre. Además, suponen un riesgo para la inversión en el mercado financiero y, por tanto, dependen de grandes subvenciones públicas y garantías de préstamos.
Por su parte, la Agencia Internacional de Energía, en su escenario de cero emisiones netas 2050, insiste en que para mantenernos en una trayectoria de 1,5° C no se puede invertir en nuevos proyectos de gas y petróleo. El escenario de 1,5° C ha empezado a ser considerado en la evaluación del riesgo del cambio climático por parte del sector financiero. A esto hay que sumar que en los países de la Unión Europea donde las reservas de gas y petróleo no son significativas, este tipo de inversiones solo contribuyen a aumentar la dependencia e in- seguridad energética.
Finanzas sostenibles
La taxonomía no es un instrumento de planificación energética, es un instrumento de clasificación de finanzas sostenibles. Tampoco aspira a definir la matriz energética de un país, sino a generar la confianza suficiente en las finanzas sostenibles europeas.
Europa busca posicionarse como líder de las finanzas sostenibles, y últimamente tiene muchos competidores en esta área. La taxonomía de China excluye el gas de la electricidad, la de Corea del Sur, a la energía nuclear, y la de Colombia excluye a ambas. El actual mercado mundial de bonos verdes también deja fuera al gas y a la energía nuclear, y la Taxonomía de la UE no puede quedarse atrás.
Si un inversor duda de que las actividades clasificadas no son sostenibles, empleará sus propios estándares, y la taxonomía, al haber incluido estas actividades en lugar de haber fortalecido la transparencia y la competitividad del sistema financiero europeo, habrá contribuido a generar confusión.
Muchos inversores, bancos y coaliciones de inversores como el Grupo de Inversores Institucionales sobre el Cambio Climático (IIGCC), con 50.000 millones de dólares de activos bajo gestión y BlackRock, la gestora de activos más grande del mundo, con 7.000 millones de dólares bajo gestión, han criticado el acto delegado complementario de Taxonomía.
Martin Lueck, Jefe de Estrategias de Inversión de BlackRock, señala: «Solo hay que pensar en la Taxonomía de la UE, en la que la energía nuclear y la fósil, como el gas, se etiquetan como fuente de energía sostenible, lo que obviamente es un sinsentido, y todos lo sabemos». El Banco Europeo de Inversiones y los Principios de la ONU para la Inversión Responsable (UNPRI) también se han sumado a las críticas al acto delegado.
La ciudadanía europea ha priorizado las inversiones en energías renovables. De acuerdo a los resultados de la encuesta realizada en febrero por la consultora OnePoll, cerca del 80% de los españoles respaldan las energías renovables, y los ciudadanos europeos en la Conferencia sobre el Futuro de Europa han propuesto acelerar la transición verde, mediante más inversiones en energías renovables para reducir la dependencia energética externa. Los eurodiputados deben estar a la altura de las aspiraciones y expectativas expresadas por los ciudadanos.
Votación de futuro
En las votaciones que tendrán lugar entre el 14 y 16 de junio nos jugamos mucho, y esperamos que los eurodiputados elijan la opción que respalda la ciudadanía española y europea. A la población le costaría entender que se haya calificado el gas y la nuclear de inversiones verdes cuando no solo son contaminantes, sino más costosas y generan mayor dependencia energética, en lugar de apostar por la energías renovables donde Europa tiene un mayor potencial.
Cabe recordar que los eurodiputados deben votar siguiendo la legalidad. El Reglamento de la Taxonomía establece que los criterios para definir las actividades sostenibles deben basarse en la ciencia y las actividades no deben causar daño significativo a otros objetivos ambientales. De ser aprobado en contradicción a estos criterios, el acto delega-do podría ser impugnado, como ya han anunciado Austria y Luxemburgo, generando inseguridad jurídica, y no hay nada que preocupe más a los inversores.
Vetar el acto delegado de la Taxonomía supone una oportunidad para construir una mejor Europa, más independiente energéticamente, moderna y dueña de su propio destino.
Los inversores y los bancos necesitan información fiable sobre el impacto ambiental de las actividades que consideran financiar. Europa no puede ceder el espacio ganado. La ciudadanía europea y española estará atenta al resultado de las votaciones en el Parlamento Europeo, confiando en que sus eurodiputados tomen la mejor decisión para que prevalezca el interés general por impulsar un verdadero futuro sostenible.
Este artículo informativo fue publicado originalmente en la edición nacional del Diario ABC, en la sección EMPRESA, el domingo 5 de junio de 2022
MÁS info:
For EU green taxonomy fans: draft of new commission text opens door for gas to be classified as taxonomy compliant. This is "shades of green" labelling that environmental campaigners have been fighting against. Commission forced to redraft after initial text was rejected by govs pic.twitter.com/riBXTn7knv
— Mehreen Khan (@MehreenKhn) March 22, 2021
The EU’s gas Taxonomy has been called ‘unhelpful’ by leading investors. Check out 5 reasons MEPs should oppose the inclusion of gas and nuclear power: https://t.co/5OzDF3yCsj #StopFakeGreen pic.twitter.com/f3BXGNn9LW
— WWF EU (@WWFEU) June 8, 2022
© Terabithia Press 2022 Fotos / Agencias – A. Fdez. Sanandrés

terabithia world’s wildlife photography
En el arte de la fotografía, que es por excelencia el arte de la oportunidad, una sola golondrina suele hacer todo el verano.
Sin embargo, también como las golondrinas, esa sola fotografía sumaria no hubiera sido posible sin todas las otras
gabriel garcía márquez
Periodista
Nobel de Literatura 1982












